Barcelona. (EFE).- El secretario general de Unió, Josep Maria Pelegrí, ha recalcado que CiU "nunca ha sido" independentista, por lo que "no impulsará" consultas de autodeterminación como la de Arenys de Munt (Barcelona) y ha avisado a CDC de que sería "un grave error" querer competir con ERC por ver "quién es más nacionalista".
Después de que el presidente de la sectorial de inmigración de CDC, Àngel Colom, dijese que su partido "acompañará" las consultas de autodeterminación de Catalunya que se convoquen en municipios de Catalunya, Pelegrí ha recalcado que, en cualquier caso, CiU y Unió "respetarán" este tipo de iniciativas, aunque de ninguna manera las "impulsarán".
Tras dejar claro que "Colom no es de Unió" y por lo tanto no puede hablar en nombre de los socialcristianos, Pelegrí ha remarcado tras la reunión del comité de gobierno de Unió que "CiU no ha sido nunca una fuerza política independentista". Unió, ha recordado, "está a favor de la autodeterminación" porque se trata de "un derecho inherente a la persona", pero su modelo de Estado preferido es el de la "confederación".
Pelegrí es consciente de que dos de los socios del tripartito, ERC e ICV-EUiA, "impulsan este tipo de consultas", pero no por ello CiU debe verse arrastrada a seguir la misma pauta: "Sería un grave error competir por ser más nacionalistas que otros", ha subrayado. Según Pelegrí, no por evitar mostrar su apoyo a los referendos municipales de independencia "quiere decir que seamos menos nacionalistas".
De hecho, desde Unió se insistirá en que el debate de política general de finales de este mes en el Parlament de Catalunya no esté centrado en esta cuestión, sino que se centre en buscar salidas a la crisis económica, asunto que el propio secretario general de CDC y presidente de CiU, Artur Mas, ya ha situado como prioritario.
Pelegrí ha acusado además al ministro de Fomento, José Blanco, de "engañar a la gente" al considerar "chocante" el apoyo de CiU a la consulta de Arenys de Munt, cuando en realidad dos de los socios de los socialistas en el Govern han sido promotores de la iniciativa.
Ante la posible convocatoria de nuevas consultas, Unió rechazará todas aquellas iniciativas que supongan una "vulneración de la ley", pero si están dentro de los márgenes de la legalidad y no es el gobierno municipal, sino una entidad privada la que convoca el referéndum, será cada concejal quien decida si la apoya.
Pelegrí no ha querido polemizar sobre el abierto respaldo a la consulta de Arenys de Munt de Agustí Bassols, ex conseller y un histórico de Unió, y ha asegurado que nadie de la dirección del partido le presionó para hacerle cambiar de actitud. Lejos de interpretar el triunfo del 'sí' a la independencia en Arenys de Munt como una expresión extrapolable a todo el país del aumento de partidarios de crear un Estado propio catalán, Pelegrí ha atribuido los resultados de la consulta a un cúmulo de motivos. Para Pelegrí, no todos los que ayer votaron 'sí' tienen un claro sentimiento independentista, sino que algunos respondieron así por su "malestar" e "insatisfacción" con la actitud del tripartito.
En este sentido, Pelegrí ha recordado que "en 23 años de gobierno de CiU no hubo ninguna situación como ésta", porque no había tantas "personas insatisfechas" con la "falta de liderazgo" y de "rumbo" político en el Govern. Otra de las razones que en su opinión puede haber inducido a votar 'sí' es la reacción a la "inadmisible y deplorable" actitud del Estado al intentar frustrar la celebración de la consulta, así como al "desafío de Falange".
Por otro lado, sobre el acercamiento del presidente del Barça, Joan Laporta, al movimiento independentista de Joan Carretero, ha dicho que le parece "muy bien" que se pronuncie de esta forma ya que así se clarifica su ubicación política, aunque le ha recordado que lidera un club en el que no todos sus socios son independentistas. En cualquier caso, según Pelegrí, el movimiento de Carretero "puede hacer más daño a ERC que a CiU".